martes, 8 de julio de 2014

Esta no es una despedida normal

Llevo meses meditando sobre estas últimas líneas. Quizá, para desentenderme del tema lo antes posible, pensaba que la mejor manera de despedir un proyecto que me ha dado tanto sería contar todo lo que había conseguido y nombrar con un tono de gratitud a todas aquellas personas que me han acompañado y apoyado en mi andadura. No sería fiel a mí mismo, y no lo sería porque creo que no debo de desperdiciarlas en algo tan común y pesimista como es despedir lo acabado. Lo acabado no se despide, pues siempre formará parte de uno mismo.

Al fin y al cabo esta iniciativa no debería de haberse llamado Somos Parte, y es principalmente ese el motivo por el que decidí no escribir más en la misma. Se debería de haber llamado, simple y llanamente, Mario, pues en ella he conseguido saciar mi curiosidad sobre el mundo del ecologismo, y sobre todo olvidar otros mundos que aún me interesaban más. Debo de reconocer que cuando se escribe, al igual que cuando se juega al baloncesto, tu atención y tu conciencia se centran en dicha acción, dejando escapar a las que ocupan tu mente cuando tu ser se encuentra desocupado. Lo cual supone cierta contradicción, lo sé, pero huir es algo a lo que ya me he acostumbrado.

Me agradezco a mí mismo estos más de tres años escribiendo sobre algo que a poca gente, excepto a mí, interesaba. Me gustó hacerme notar, en cierta forma tratar temas de actualidad con personajes públicos de primer nivel (o de segundo o tercero la mayoría de veces). Me enseñé a redactar de cara a posibles futuros proyectos en los que ya estoy pensando, me atreví a continuar con algo por cabezonería y tuve el valor de dejarlo cuando de verdad apareció un atisbo de hastío.

No es el primer proyecto que abandono, no creáis. Me he licenciado en esa ciencia. Tiene sus cosas buenas, pues ahora, en la silla de mi escritorio, me encuentro cerrando una puerta de mi vida más importante de lo que hasta yo pensaba y lo tomo con naturalidad. Caray, dije que esto no trataría sobre el Medio Ambiente y me encuentro ahora hablando de lo natural. Sin duda he conseguido involucrarme con el 'todos por todos' que arengué en mi primer artículo.

La página se mantendrá abierta como recuerdo para quien alguna vez sienta la necesidad de visitarla, aunque la mayoría sabemos que hablamos sobre todo de mí mismo. No lo niego, creo que es algo de lo que puedo y podré presumir en un futuro.

Pero es mío. Es ideal y real, como bien le enseñó el discípulo Aristóteles a su maestro Platón, aunque este jamás llegara a leerlo. Lo ideal se encuentra dentro de lo real, y para mí esto es ideal. Creedme, ahora mismo también lo convertiré en real.

Un abrazo a todos.